Este año tuvimos otra celebración que pasó inadvertida en el sur de Lima. Hace cincuenta años atrás se iniciaron los trabajos arqueológicos en Villa María del Triunfo y casi nadie se acordó de ello.
Pudo haber sido un año de celebraciones, reconocimientos y homenajes, pero también de balances, debates y discusiones. Nada de eso se hizo. Me pregunto, cuanto conocemos de nuestro pasado, cuan cerca nos encontramos de el y cuanto nos sentimos parte de este proceso histórico que tienes miles de años.
Pudo haber sido un año de celebraciones, reconocimientos y homenajes, pero también de balances, debates y discusiones. Nada de eso se hizo. Me pregunto, cuanto conocemos de nuestro pasado, cuan cerca nos encontramos de el y cuanto nos sentimos parte de este proceso histórico que tienes miles de años.

Hace 50 años atrás, debido a las noticias de que se venía realizando huaqueos en un sector de las lomas, entre Tablada de Lurín y la Fabrica de Cementos de Atocongo, El Instituto Riva Agüero de la Universidad Católica del Perú consiguió la primera autorización del estado para realizar trabajos arqueológico en el lugar, a través de la Resolución Ministerial No.1500 de febrero de 1958. Desde ese momento, se han renovado periódicamente las autorizaciones, pero sobre todo se ha conocido nuestro pasado y, han salido a luz más de un centenar de trabajos de investigación entre libros, artículos y tesis universitarias. Desde temas tan diversos, como la que hace poco presentó Maria Eugenia Codina en una disertación en el Museo Nacional de Arqueología Antropología e Historia del Perú, sobre “Los instrumentos musicales prehispánicos: Tablada de Lurín” (14.02.2008).
Durante estos 50 años, los trabajos arqueológicos han estado a cargo de la Universidad Católica, y han tenido hasta tres etapas temporales de investigación a cargo de Josefina Ramos de Cox, Mercedes Cárdenas y Cristóbal Makowski. Estos han demostrado que en este lugar ha habido hasta cuatro periodos de ocupación: Periodo Precerámico. (aprox. 6,000 - 4,000 a.C.) de cazadores y recolectores nómades; Periodo Formativo. (aprox. 900 a.C.), con el establecimiento de un campamento temporal; Periodo Formativo Superior. (aprox. 200 a.C. - 0), compuesto por un cementerio en pozos de una población cercana; Periodo de Desarrollos Regionales. (aprox. 100 - 300 d.C.), de un cementerio de tumbas subterráneas colectivas.
Después de tanto devenir, sería oportuno preguntarnos, que ha significado estos cincuenta años para los pobladores de Villa Maria, para los investigadores en el conocimiento de las poblaciones de lomas costeras, para las autoridades locales en la protección, defensa y promoción del patrimonio cultural local.
Hasta cuanto ha servido para constituir una identidad local propia, diferente y única. Sabiendo que este elemento puede ser la línea trasversal en la política de desarrollo de una comunidad, ciudad, distrito.
Pero, lo cierto es que muy pocos se acordaron, y la responsabilidad inmediata fueron de las autoridades locales. El concejo municipal pudo haber denominado este año, en el ámbito local, a través de un acuerdo de concejo: “Cincuenta Años de Arqueología en Villa Maria del Triunfo”, y formado una comisión, pero posiblemente tengan en mente que el fútbol sea lo único que salvará al Perú y al distrito.